Ya me esta entrando el sentimentalismo de fin de año, ese en el que analisas como te fue estos 12 meses con sus 365 días de aventuras.
La verdad no puedo quejarme de este año, ha sido redondo!
Si me hubieran dicho que este año iba a regresar a la escuela, cruzar medio mundo, pasar el examen imposible, que me iban a descalabrar, me hubiera carcajeado, ja!
La verdad me siento bien afortunada: tengo una familia que me aguanta con todas mis loqueras, una hija que la mayoría de las veces me enseña más de lo que he aprendido en mi vida y me da el amor más incondicional de todos. Salud y trabajo.
Sobre todo me siento infinitamente agradecida por tener estos amigos incondicionales que son amigos así, de la vida. Ese descalabro no hizo más que demostrarme una vez más que es en los momentos difíciles donde se conoce a las personas que hay que conservar en la vida. Y si a eso le sumamos que hemos pasado momentos memorables y divertidos, que más se puede pedir?
También están mis compañeros de trabajo, que son como mi familia, los veo más que a mi hija! Todos los días me enseñan que a pesar de las diferencias estamos trepados en el mismo barco y con todo y los desacuerdos la unidad hace la fuerza.
Me siento plena, realizada, feliz y muy contenta. Hasta podría decir que me siento una chamaca de 20, jajaja!
Y la soltería... Pues que viva la soltería! Como dice mi amigo el ídolo juvenil: "Soltera pero no sola".
De verdad me ha encantado este 2012, con las de cal y las de arena, he aprendido mucho y amado más.
Que el 2013 llegue con más! Y que sea otro año de esos que me gustan: REDONDO!
